Hoy en día los dispositivos informáticos constituyen la fuente principal de información acerca de los individuos. Tenemos más información en el móvil que la que tienen nuestros padres, nuestros hermanos o incluso nuestros amigos sobre nosotros mismo.
A través, por ejemplo del acceso a nuestra ubicación, determinadas aplicaciones saben dónde estamos en todo momento, los restaurantes que nos gustan, o si viajamos más o menos. Es muy fácil conocer nuestra capacidad económica, no solo por los ingresos que podamos tener, sino por las compras que realizamos en tiendas u online a través de las aplicaciones en las que introducimos datos de nuestra tarjeta de crédito.
En el momento que una aplicación recoge nuestros datos personales, estos no se mantienen “estancos” sino que muchas veces se distribuyen o procesan a través de algoritmos que los interpretan para conformar modelos de comportamiento. El fin último de muchas empresas es la realización de nuestro perfil tipo como consumidores que permitirá entre otras cosas favorecer un uso más específico y adecuado de la publicidad que nos llega como consumidores. Pero sin lugar a dudas constituye un problema a efectos de protección de datos personales.
También debemos añadir que el traspaso de los datos y su procesamiento, aunque requiere de nuestro consentimiento, resulta mucho más difuminado o a veces inexistente en especial cuando se trata de grandes empresas o grupos que ostentan la titularidad de varias aplicaciones que utilizamos. Sin darnos cuenta, estamos permitiendo a grandes grupos empresariales consolidar toda nuestros datos provenientes de distintas fuentes (aplicaciones).
Compartir nuestros datos supone un riesgo, y por lo tanto, somos vulnerable a ingeniería social. Podríamos ser manipulado a través de técnicas psicológicas y habilidades sociales para cumplir metas específicas. En este caso se aplicaría al terreno de la ciberseguridad. La mayoría de los hackers utilizan estas técnicas para beneficiarse del uso de información y de tecnicas psicologicas para engañarnos.
Otra de las técnicas conocidas es el phising. Es uno de los métodos más utilizados por delincuentes cibernéticos para estafar y obtener información confidencial de forma fraudulenta como puede ser una contraseña o información detallada sobre tarjetas de crédito u otra información bancaria de la víctima o solicitar el pago de factura suplantando la identidad de una persona conocida . Ambas técnicas expuestas constituyen delitos puesto que tratan de robar nuestros datos confidenciales y realizar actos delictivos.
¿ Cómo actuar en caso de tener una sospecha de phishing o ser victima de un phising?
017, el número para ayudar en ciberseguridad
Para solventar este problema el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) ha lanzado el número de teléfono 017 para ayuda y resolver dudas relacionadas con la ciberseguridad. El 017 centraliza los servicios de atención telefónica que ofrece INCIBE relativos a dudas o consultas sobre ciberseguridad, privacidad, protección de datos, confianza digital, uso seguro y responsable de Internet y de la tecnología. El servicio está dirigido entre sus públicos principales al colectivo de empresas y a los profesionales que utilizan Internet y las tecnologías en el desempeño de su actividad y deben proteger sus activos y su negocio.
Desde Fellow Funders nos parece, sin lugar a dudas, una gran iniciativa que podría evitar riesgos empresariales serios como, por ejemplo, el fraude del CEO solicitando a su CFO el pago de una factura urgente por email. Por todo ello, nos gustaría que se convirtiese en un número de referencia para todas las empresas y que forme parte de sus vidas como algo cotidiano, con el objetivo de promover una cultura de la Ciberseguridad en nuestro país. Cualquier empresa que tenga dudas respecto al uso de Internet, las nuevas tecnologías o la protección de datos podrá resolverlas gracias a un equipo de profesionales especializados que atenderán su llamada.
Sin lugar a duda, nuestros lectores cuando se propongan darse de alta en una aplicación nueva, deberán preguntarse “¿Cuántos términos y condiciones aceptados habéis leído?”. Keep Safe.
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