Desde hace unos meses vivimos una situación de crisis sanitaria provocada por el Covid-19 que amenaza con convertirse en una crisis económica mundial ya que el confinamiento ha impactado fuertemente en la oferta, demanda y las finanzas, los tres pilares fundamentales de la economía. Por lo que en esta situación es esencial tomar las medidas apropiadas y coordinadas para reducir la propagación del virus.
Aunque todavía es pronto para conocer exactamente los datos estadísticos acerca del impacto que ha tenido esta crisis en la economía, se puede apreciar una caída en la demanda debido a la disminución de uso de transporte, actividad comercial y consumo de energía. En cuanto a la oferta, son muchas las empresas que se han visto obligadas a cerrar sus puertas temporalmente y otras que han estado funcionando muy por debajo de sus capacidades, lo que conlleva a una caída de producción en general. Es por ello que los gobiernos están desarrollando medidas de alivio de la deuda y ofreciendo programas de aplazamiento de negocios.
En el ámbito industrial han habido diferentes reacciones a esta crisis, muchos han optado por la reducción de costes y por buscar alivio de dudas y compensación de los gobiernos. Otras compañías han optado por la reutilización de sus lineas de producción para la producción de material de urgencia como las mascarillas y los respiradores, entre otros. Mientras que muchas organizaciones se decantaron por el teletrabajo y el comercio online.
Algunas de las medidas que se deben tomar para reducir el impacto de Covid-19 en las empresas:
- Teletrabajo siempre que sea posible
- Evaluar el impacto de la pandemia en la empresa desde las persepectivas operativas y financieras
- Gestionar el flujo de caja en la cadena de suministro
- Abordar el impacto de la pandemia en obligaciones derivados de contratos con sus socios de negocios
- Abordar los riesgos clave y garantizar la continuidad del negocio.
Lo primero que deben considerar los líderes de las empresas para hacer frente al Covid-19 es la fuerza laboral, se debe asegurar la salud y bienestar de los empleados. La Organización Mundial de la Salud (OMS) aconsejaba suspender todos los viajes de negocios, a menos que sean totalmente necesarios y trabajar desde casa. Pero esto no es posible en todas las empresas ya que muchas no están preparadas para ello por lo que han tirado por un método del trabajo más flexible.
Además, también se debería contar con una estructura de tecnología sólida ya que son muchos los procesos de negocios que dependen de la tecnología y sobretodo para poder hacer frente a situaciones de crisis como esta de una forma más eficaz.
Otra medida a considerar por las empresas es tener una clara comprensión de su cadena de suministro en todos sus niveles ya que esto permitirá identificar los puntos más vulnerables, se debe evaluar los productos más críticos así como la mejor forma de estabilizar su cadena de suministros. Por otra parte, la comunicación es esencial, los líderes deberán mantener informados a todos sus grupos de interés tanto internos como externos, ya que es una pieza clave para hacer frente a la crisis.
Fuentes: HLB Global, Industrial Analytics Plataform, Deloitte, Strategy Business